9.15.2010

Capítulo 21

La semana previa al partido fue la semana más larga de la vida de Agustín. Sentía que los días no pasaban más y las horas de clase se hacían larguísimas.

Su único consuelo en esa larga espera se llamaba Ana y que encima por trabajo no se pudieron ver en toda la semana, lo que hizo que el tiempo no pase más.

Todas las noches hablaban por teléfono y se prometían verse al día siguiente si ella no terminaba de trabajar tan tarde.

Como era la semana del súper clásico, el trabajo en la Bombonera era enorme y a Ana no le alcanzaban las manos para hacer todo el suyo. Mientras tanto, Agustín seguía soñando con ese domingo tan preciado, en el cual él cumpliría su sueño.

La semana previa al clásico suele ser una donde los nervios están a flor de piel, y el tiempo para el domingo se hace muy lento. Sumados a sus nervios normales, Agustín sabía que cumpliría su sueño, lo que lo hacía estar aún más tenso todavía.

Agustín empezaría a concentrar con los jugadores en el hotel del club el sábado por la tarde. Tendría que estar en el hotel a eso de las seis para hacer el chek-in y así poder hospedarse con los jugadores como un profesional.

Las noches para Agustín eran eternas y de tanto pensar se terminaba de dormir a eso de las cuatro de la mañana mientras soñaba con hacer aquel gol que le daría el triunfo a su tan querido Boca Juniors. Y los días también se hacían interminables ya que encima sus compañeros no hacían más que recordarle que el domingo entraría a la cancha con Palermo y Riquelme.

A pesar de la lentitud, el viernes por fin había llegado y solo un día lo separaba a Agustín de su tan ansiado sueño. Como Agustín ya sabía, pero obviamente con previo aviso por parte de Ana, lo llamaron de la radio partidaria del club para hacerle una entrevista.

La entrevista no duró más de diez minutos, pero para Agustín duro una eternidad y los nervios le empezaron a jugar una mala pasada.

Ana también le comentó que una persona le llevaría a su casa el conjunto deportivo de Boca para que pueda concentrar y entrar a la cancha, lo que lo puso aún más tenso ya que no podía comprender lo que le estaba pasando y que por fin conocería a sus ídolos y cumpliría su mayor sueño.

La noche del viernes fue la noche más larga en la vida de Agustín. Después de comer y terminar de hablar con Ana por teléfono, Agustín se fue a recostar y allí su cabeza empezó a latir entre imágenes, sueños, risas y llantos.

Para tratar de calmar sus sueños, Agustín trato de ponerse a escribir y ojeando su cuaderno donde guardaba todas las cosas que escribía encontró uno que había titulado Sueño de Primera:

“Hoy me levante sobresaltado de nuevo.


Soñé que jugaba en la primera de mi club.


Por si no lo sabes, quiero ser futbolista.


Sueño con meter un gol en el último minuto contra nuestro clásico rival y que toda la cancha coree mi nombre mientras corro abriendo los brazos sintiéndome inmortal, para después besar el escudo de mi camiseta.


Tengo pensadas muchas gambetas y caños para hacer.


Quiero dar un pase de gol, o trabar sin miedo a romperme la pierna.


De solo pensarlo se me eriza la piel.


Quiero jugar en la primera de mi club, y jugar de manera tal, que el hincha piense que juega en mí.


Lástima que recién me despierto y falta mucho para dormir.


Por si no lo sabes, todavía sueño con jugar al futbol en la primera de mi club.”

Después de leerlo Agustín recordó la noche en que había escrito ese poema y sin darse cuenta una lágrima cayó sobre el papel. La emoción lo había paralizado y no podía dejar de llorar pensando también en su padre que no estaría para verlo cumplir su sueño.

Agustín se quedó despierto toda la noche sin poder dormir mientras soñaba y soñaba despierto ese gol que dedicaría al cielo. Sabía que no podría jugar, pero sus sueños le alcanzaban para hacerlo y así lograr su máximo anhelo.

Sin darse cuenta y mientras dormitaba ya de día sonó el timbre. Era Ana que le traía para probarse varios talles de camisetas, pantalones, buzos y camperas de Boca.

Sobresaltado, Agustín preguntó agarrándose la cabeza, ¿hoy ya es sábado?

1 comentario:

  1. PELUCA NO UNICO QUE PUEDO DECIR ES

    ESPECTACULAR!!!!!!!!

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